LA MISION HASEKURA

Acontecimientos históricos
En octubre de 1613, bajo órdenes del señorío de Sendai, Masamune Date, la misión Hasekura zarpó en el barco japonés San Juan Bautista desde el puerto de Tsukinoura, rumbo a México (entonces Nueva España) con el samurái Tsunenaga Hasekura como embajador, encabezando una tripulación de unas 180 personas.
El principal propósito de la misión Hasekura era el establecimiento de un comercio directo entre Japón y Nueva España. Asimismo, se estima que sus objetivos eran el envío de misioneros para propagar el cristianismo en el territorio de Sendai, y la adquisición de su tecnología para la producción de plata.
En enero de 1614, después de un viaje de más de tres meses por el Océano Pacífico, la tripulación de Hasekura arribó al puerto de Acapulco, el más grande de la Nueva España en aquel entonces, donde fue recibido por el representante del Virrey de la Nueva España. Así el 2014 marca el 400 aniversario de la llegada de la primera misión comercial-diplomática que Japón envió a México.
En marzo de 1614, tras recorrer varias ciudades entre ellas Cuernavaca, la misión Hasekura llegó a la capital (actual Ciudad de México), donde se entrevistó con el Virrey y el Obispo de México, algunos tripulantes de la delegación fueron bautizados en la Iglesia de San Francisco. En mayo del mismo año, la delegación salió de la Ciudad de México y en junio, pasando por Puebla, Hasekura y unos veinte tripulantes partieron del Puerto de San Juan de Ulúa, Veracruz rumbo a Sevilla, España vía La Habana, con el propósito de conseguir el consentimiento y apoyo del Rey español y del Sumo Pontífice para el establecimiento de un comercio directo y el envío de misioneros.
En Europa, Hasekura se entrevistó con el Rey Felipe III de España y el Sumo Pontífice Paulo V, a quienes transmitió las misivas de su señor Masamune Date. La Misión de Hasekura volvió a México en 1617, y partió de Acapulco en abril de 1618, rumbo a Manila, donde esperó en vano la respuesta del Rey de España.
Finalmente, sin haber recibido respuesta, regresó a las tierras de Sendai. Mientras la misión viajaba durante 7 años, las políticas internas en Japón habían dado un giro, la prohibición del cristianismo y el aislamiento internacional, los cuales hicieron ya imposible realizar los propósitos de la Misión Hasekura.
El significado e importancia de la Misión Hasekura
El viaje de Hasekura que duró 7 años, de ida y vuelta entre Japón y Roma, fue una hazaña épica y cabe destacar que ya en el siglo 18 Japón estaba consciente de la importancia geopolítica de México. El objetivo de la misión, el establecer un comercio directo con México, aún mantiene su importancia en el contexto de las relaciones bilaterales Japón-México de hoy en día y existen lecciones contemporáneas en la visión global y la iniciativa diplomática proactiva que sostenían los japoneses en aquella época.
Podríamos decir que uno de los sueños de Masamune Date, al enviar la misión de Hasekura, se habría realizado aproximadamente 400 años después, a través del Acuerdo de Asociación Económica Japón-México. Asimismo, el hecho de que Hasekura no se rindiera ante obstáculos insuperables para conseguir los objetivos de la misión, muestra el coraje y firmeza del auténtico espíritu de samurái. Además, no podemos dejar de mencionar que fueron los pioneros de los inmigrantes japoneses en México aquellos tripulantes que se adaptaron a la sociedad mexicana sin regresar a Japón.